Reencuentro.
... Durante el trayecto Gari no dejaba de darle vueltas sobre qué iba a contarle, de por qué se había ido sin ninguna explicación, aunque desde que se fue, él tampoco se había preocupado demasiado por averiguarlo. Ni siquiera una llamada, pero qué iba a reprocharle si había sido ella la que se había marchado. El personal de limpieza deambulaba entre las habitaciones y cuando llegó, su puerta estaba abierta. Se quedó observando al que había sido su pareja durante tanto tiempo. Parecía dormir. No había nadie con él, aunque era pronto, pero Gari dudaba que algún familiar acudiera a cuidarle. Estaban todos lejos. Su hermano Alfonso, con el que más relación tenía, vivía en las islas Canarias, le resultaría complicado acudir, aunque conociendo a Antonio, Gari estaba segura de que ni siquiera lo sabría. Tendría que ser ella la que le llamara para contarle lo que le sucedía. Su cabeza se giró y miró hacia la puerta, como si hubiera adivinado que le observaban. Ambos se miraron. Gar