La trinchera.




Llega tarde.
Escuchaba como pasaban los misiles por encima de mi cabeza, era el silbido de la muerte, así lo llamaban, y las balas cada vez se iban acercando más. Esperaba una señal que indicara el final, que todo había acabado, fuera buena o mala, pero que terminara.
Había decidido seguir en pie, mientras esperaba, llegaba ya tarde, y pensaba que quizá esa idea no había sido ta buena.
Me levanté despacio, sin prisa, ya nada tenía mucho sentido. Llegaba tarde, sólo tenía que aguantar hasta que el sol acogiera a los hombres tras la trinchera. Ya legaba tarde.
La lluvia de proyectiles se intensificaba y el enemigo se acercaba. Enemigo, que palabra, quién es el enemigo, ya no reconozco a los amigos y los que intentan acabar con nuestra vida están tan asustados como nosotros.
Ahora oigo un sonido diferente y sus sombras nos cubren, son aviones que parecen buitres buscando algo con lo que alimentarse, pero tan solo encontrarán almas desnudas y hombres asustados.
Llega tarde. Ahora, lo único que espero es no padecer. Caen cascotes sobre mi cabeza y los cuerpos de soldados que como yo esperan que pronto llegue. Veo algo al fondo de la trinchera, que subsiste y resiste, una flor, una pequeña flor que esparce esperanza en mi corazón. La primavera llegará queramos o no, y la vida seguirá, nos destruyamos o no.
Las aves se abren paso entre tanto ruido, siguen su camino hacia el norte, con la llegada de una nueva estación, ajenos a la barbarie del hombre, surcan los cielos igual que las balas se abren paso entre bestias, máquinas y hombres.
Ya llega tarde, pero espero, espero a que llegue, ella siempre llega y entre sus brazos nos acoge, llegará cuando sea necesario.
Cierro los ojos y espero, pero eso nunca sucede «¡todo ha terminado!», gritan los hombres. «¡La guerra ha llegado a su fin!», pero tanto ellos como yo saben que eso es mentira, la guerra nunca acaba, la guerra sigue acechando entre las sombras de mi mente, me persigue y me acosa y tras las trincheras espero impaciente que pronto llegue esa Dama llamada: Muerte.
Llega tarde.

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